Desde la Asociación de Empresas de Teatro de Aragón ARES, queremos manifestar y poner en conocimiento de los medios de comunicación, para que lo hagan llegar a la opinión pública, nuestra inquietud y preocupación ante el retraso en la publicación de la convocatoria de ayudas ordinarias al sector profesional de la cultura de Aragón para el año 2022, por parte de la Dirección General de Cultura del Gobierno de Aragón.
La situación generada por este retraso, hace peligrar puestos de trabajo, deja pendientes de un hilo proyectos culturales consolidados en los últimos años y pone en riesgo la existencia de un tejido empresarial cultural consolidado. Las empresas culturales han soportado la pandemia -en muchos casos con el cierre de sus negocios- y han visto tambalearse su forma de vida; estamos soportando la crisis económica y esperamos la convocatoria de estas ayudas para 2022 como un elemento vital para la supervivencia del sector. Ante la incertidumbre generada, muchos proyectos de producción están a medio desarrollar, las giras en entredicho y las programaciones realizadas o comprometidas hasta final de año, soportando, un riesgo y una situación económica precaria.
En reiteradas ocasiones se ha informado al Gobierno de Aragón de los tiempos y plazos más idóneos, para la ejecución de los proyectos del sector, de publicación, resolución y justificación de las ayudas. Siendo el primer trimestre del año el periodo más acorde con las necesidades de producción y programación. Podemos entender una ligera demora, en casos excepcionales y por causas sobrevenidas, como en 2020, pero el retraso en la publicación, no puede cronificarse ni obviar sus consecuencias.
También las ayudas económicas a la cultura que provienen de Europa están en riesgo por los plazos solicitados para su concesión y ejecución. Así que, solicitamos de la Dirección General de Cultura una pronta y eficaz respuesta que tranquilice al sector y reactive su actividad productiva con lo que esto supone en puestos de trabajo y actividad económica. Sabemos que con la concesión de estas ayudas se generan más de 100 nuevos puestos de trabajo y cierta estabilidad para el resto del sector cultural: no solo artistas, también personal técnico y administrativo y no solo del teatro, también de la música, el audiovisual, las artes plásticas y el mundo editorial.
Sorprende que sí puedan anunciarse programaciones arbitrarias asumiendo costosas producciones desde la propia gestión pública y dejando fuera al sector económico privado. Las políticas culturales deben garantizar la transparencia y la libre concurrencia, única manera de asegurar los derechos de los ciudadanos al acceso y uso de sus derechos culturales.
Solicitamos la urgente publicación de la convocatoria ordinaria de ayudas para el año 2022, estamos en julio y tan solo quedan tres meses y medio para resolverla y poder ejecutar los proyectos. Es imprescindible que se resuelvan las concesiones lo antes posible para serenar al sector profesional de la cultura en Aragón y acabar con la incertidumbre y pesar que está paralizando muchos proyectos.
Pedimos a la administración más eficacia y agilidad, necesitamos una gestión con más afecto y menos efecto.
