La portavoz de Chunta Aragonesista en Andorra, Sofía Gómez, ha mostrado su preocupación por la calidad del agua en el municipio y la cantidad de cal que posee. “Por un lado, el agua no llega con suficiente presión a algunas zonas del casco urbano y, por otro, debido a la mala calidad de la misma, ocasiona diversas averías en los electrodomésticos e infraestructuras de los andorranos; además de ser excesivamente cara”, ha explicado.
“Nunca se ha entendido que, en un servicio básico y primordial, los sucesivos equipos de gobierno se hayan desentendido de su gestión directa y hayan derivado su cometido al control privado del agua, cuando casi todos los partidos progresistas predican la remunicipalización del servicio del agua con control y gestión del ayuntamiento”, recuerda.
En este sentido, Sofía Gómez señala que Chunta Aragonesista presentó una iniciativa en el Senado a través de Carles Mulet, senador de Compromís, para conocer los proyectos del Gobierno de España sobre el abastecimiento de agua a Andorra una vez cerrada la central térmica, concretamente sobre cómo va a disponer de la concesión de 18 hectómetros cúbicos que utilizaba hasta ahora la central térmica.
En su respuesta, el Gobierno de España explica que Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) está tramitando en este momento el expediente de extinción de la concesión, a cuya finalización podrán solicitar una nueva concesión otras iniciativas o proyectos en el área geográfica de la Central Térmica.
“Tras el cierre de la central, apostamos por heredar la concesión de Endesa de aprovechamiento del pantano de Calanda como primera opción para asegurar el abastecimiento futuro de Andorra”, defiende la portavoz de CHA, quien destaca el ahorro que supondría, al encontrarse las balsas en las inmediaciones de la misma, por lo que “únicamente habría que conectar la Central Térmica a los depósitos de Horcallana, dando lugar a unas aguas más baratas, de mayor cantidad y de mejor calidad que la de los otros proyectos anteriormente mencionados”.
Para Chunta Aragonesista, es imprescindible resolver esta cuestión respectiva al agua. “Ya no solo por cuestiones de calidad alimentaria, sino porque las fugas de agua y la ausencia total de mantenimiento de las tuberías y mejora en el alcantarillado puede ser significante para el empleo en el municipio”.
“Asegurar el suministro de agua de calidad a las actividades residenciales, industriales y agrícolas, es una cuestión prioritaria en nuestro municipio, para asegurar la mejor solución para sus vecinos y vecinas en cuanto a precio, calidad y abastecimiento futuro”, ha finalizado Sofía Gómez.
