El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha asegurado que defenderá “con uñas y dientes” en el debate hidráulico las grandes obras que recoge el Pacto del Agua de Aragón en su última revisión del año 2006. Lambán ha respondido así en el Pleno de las Cortes tras las solicitudes de Ciudadanos y PP en las que instaban al presidente a explicar en qué consistirá el diálogo del agua que anunció hace unas semanas.
Lambán ha justificado que la mesa que ahora propone se incluía dentro del acuerdo de gobernabilidad que el PSOE firmó con Podemos, CHA, PAR e IU. Cinco formaciones entre las que el presidente ha reconocido que existen “posiciones muy distintas en relación a la cuestión hidráulica” pero que desde el Gobierno “aceptan con total normalidad”.
Así, Lambán ha explicado al Parlamento autonómico que la mesa de diálogo se abrirá “no con ánimo de generar problemas sino de resolverlos”, como ya se hizo en otros aspectos como la limpieza del Ebro. “La mesa se ha de abrir con la voluntad de resolver problemas y llegar a acuerdos en temas que presentan un panorama bastante incierto”, ha defendido.
Como ejemplos de este “panorama incierto”, Lambán ha citado casos como los embalses de Yesa o Mularroya, sobre los que cree que existe “un amplio consenso social” que le hace creer que su futuro “no esté en cuestión”. El presidente ha nombrado también Biscarrués, una obra judicializada que pronto tendrá una resolución de los tribunales pero sobre la que Lambán no es optimista. “Hay resoluciones europeas que penden como una espada de Damocles sobre esa obra, que puede alargarse años y años”, ha lamentado Lambán, reconociendo que este conflicto sea “sinónimo de seguir manteniendo a los regantes de los Monegros con incertidumbres”
Lambán ha apostado de esta manera por una mesa en la que “generar tranquilidades” a los regantes, más allá de la defensa de una obra en concreto. “El problema no es Biscarrués sí o no, el problema es que la gente de Monegros, después de más de 100 años esperando, de una vez riegue y puedan empezar a optimizar las inversiones que han hecho para generar riqueza y empleo”, ha finalizado el presidente.
El PP condiciona su participación la mesa a un “consenso” con los regantes
El portavoz del PP en las Cortes, Luis María Beamonte, ha explicado que su partido no participará en una negociación que pretenda “desmantelar infraestructuras básicas” para la Comunidad. “Sentarnos en una mesa dependerá del consenso que para la misma exista entre las asociaciones agrarias y de regantes”, ha defendido.
Beamonte ha mostrado también sus dudas con respecto a las intenciones de Lambán con la convocatoria de esta mesa de diálogo, más aún después de que la ministra Ribera “mostrara sin escrúpulos su intención de dar un frenazo a las obras hidráulicas”. Así, el popular ha incidido en que “Aragón necesita agua” para sus agricultores, a los que ha pedido “no poner en más problemas”.
Ciudadanos propone a los partidos ejercer como “mediadores”
Por su parte, el portavoz de Ciudadanos, Daniel Pérez, ha llamado también a respetar los consensos alcanzados en la creación del Pacto del Agua y sus posteriores revisiones. El diputado naranja ha llamado así a todos los partidos políticos a “seguir trabajando con criterios de viabilidad” para actualizar los acuerdos de 2006 y “consolidar alternativas” donde las condiciones no permitan “seguir la hoja de ruta”.
En este diálogo, Pérez ha pedido a todos los grupos parlamentarios “aparcar cualquier tipo de interés electoral”, ejerciendo como mediadores para “escuchar a la gente” y “hacer que sus demandas sean una realidad”. En este sentido, Pérez ha explicado que su formación sí acudirá a cualquier mesa de debate, para la que todavía no hay ningún plazo. “Diga lugar y hora y allí habrá un representante de Ciudadanos”, ha finalizado interpelando a Lambán.