Mañana, el grupo municipal de Podemos en el Ayuntamiento de Zaragoza no hablará de localizaciones. Lo que sí planteará al resto de grupos políticos será su propuesta de campo de fútbol, un campo integrado en un proyecto de ciudad y una nueva centralidad para la misma, que se materializaría en una Ciudad del Deporte, “que no sólo suponga un nuevo espacio de uso ciudadano diario, sino que además, sirva para la atracción de inversiones y empresas vinculadas con la innovación y la tecnología en la actividad física y el deporte, uno de los campos con más oportunidades de desarrollo en la actualidad”, ha señalado Fernando Rivarés, portavoz de la formación.
Rivarés ha insistido en que “es el momento de tener ambición y buscar un proyecto de ciudad atractivo, moderno, sostenible e integrador. Si la ciudad va a hacer una inversión elevada, no nos podemos quedar sólo en la construcción del estadio de fútbol y debemos crear lo que sería una auténtica Ciudad del Deporte que resuelva las necesidades de la ciudad en materia deportiva, no sólo las relativas al Real Zaragoza”, ha añadido Rivarés.
Por ello, creen en Podemos, que es un error centrar el debate en las ubicaciones y desvincularlo del modelo de campo, de su gestión o de su financiación. “Hablar de localizaciones sin hablar de todo lo demás es empezar la casa por el tejado”, han insistido. “Del alcalde Azcón esperamos propuestas y liderazgo. Decir que le gusta un sitio u otro sin aportar nada más, ni qué tipo de campo quiere ni cómo lo va a financiar, es humo. Esperamos que mañana acuda a la reunión y nos detalle cuál va es su propuesta”, ha afirmado Rivarés.
Una oportunidad para el desarrollo tecnológico y la innovación en Zaragoza
La propuesta presentada hoy por la formación morada iría encaminada a construir la Ciudad del Deporte, en la que el equipamiento central sería un estadio de fútbol, que cumpla con las condiciones de un estadio de categoría 4 (máxima categoría FIFA), con una capacidad de 45.000 localidades y un diseño que prevea la posibilidad de aumentar su capacidad en siguientes fases si la ciudad lo precisa, para lo que sería necesario una parcela para la construcción de unos 100.000 m2. Junto al estadio, podrían habilitarse espacios para la restauración, de ocio, para eventos y una fan zone. También incluiría una cubierta solar para la autogeneración de energía, lo que redundaría en beneficio de sostenible económica y medioambiental, siguiendo el ejemplo del RCDE Stadium en Cornellá -el campo del Espanyol-.
Con esta propuesta se podrían solventar el déficit de instalaciones deportivas que tiene Zaragoza, sin un recinto abierto de capacidad intermedia, y se favorecería el crecimiento de otros clubs, como el CD Ebro o el Zaragoza Femenino así como la posibilidad de acoger eventos nacionales de otras disciplinas al aire libre como el atletismo o el rugby. Otro elemento importante de este complejo sería la construcción de una residencia de unas 200 plazas para uso preferente de clubs y federaciones deportivas, que serviría para que distintas federaciones y clubs optaran a organizar Campeonatos de España y para facilitar que clubes semiprofesionales tengan un espacio adecuado para alojar a sus deportistas. Esto redundaría en mejores sinergias para favorecer el turismo asociado al deporte.