Mejorar los niveles de actividad incrementando el rendimiento quirúrgico tanto por las mañanas como por las tardes, colaborar entre los diferentes centros públicos para la utilización compartida de recursos, informatizar el proceso quirúrgico y revisar los procedimientos de gestión de la lista de espera. Estas son algunas de las líneas de actuación del Plan de Abordaje de la Lista de Espera Quirúrgica 2022-2023, que tiene como objetivo alcanzar a finales del próximo ejercicio una disminución del 85% de los pacientes con demora estructural superior a 180 días respecto a la situación de agosto de 2020, es decir, reducir a 1.500 las demoras de más de seis meses. Para lograrlo se prevé destinar a este plan casi 30 millones de euros.
l gerente del SALUD, José María Arnal, y el director general de Asistencia Sanitaria, José María Abad, han presentado hoy las líneas maestras de del plan, que establece una serie de medidas dinámicas, que deben ajustarse a la evolución de la pandemia de COVID-19. «No se van a escatimar recursos para conseguir los objetivos marcados, tanto en contrataciones como en autoconciertos o conciertos», ha asegurado Abad. «Este tema es una de las prioridades del Gobierno de Aragón y del SALUD», ha indicado, por su parte, el gerente del organismo autónomo.
De este modo, se pretende lograr una mayor eficiencia en los recursos disponibles; priorizar las patologías con un mayor impacto de la demora en su evolución, de los procesos neoplásicos y los incluidos en el decreto de garantías; fomentar la participación activa de los profesionales; y continuar con la transparencia en la información. Asimismo, se establecerán programas especiales de aprovechamiento de los recursos públicos, de modo que los pacientes en lista de espera puedan ser atendidos en cualquier centro de la red sanitaria pública; y se continuará con la colaboración con otros centros públicos y privados.
Evolución de las demoras
La lista de espera en la comunidad ha reflejado la evolución de la pandemia de COVID-19, que comenzó en marzo de 2020 y que ha afectado de manera muy importante a la organización de los servicios sanitarios del país, más si cabe en Aragón, que ha sufrido una oleada más de COVID que el resto, elevando las demoras.
Así, el número de intervenciones quirúrgicas programadas realizadas en los hospitales del SALUD en los cinco últimos años (2017 a 2021) refleja un progresivo incremento en los tres años previos a la pandemia de COVID-19 hasta alcanzar las 95.680 de 2019, cayendo un 24% en el año 2020, con 72.713 intervenciones realizadas. Esta disminución en la actividad comenzó a revertirse en el 2021, con un incremento de casi el 23%, hasta alcanzar las 89.377 operaciones programadas.
También la pandemia ha afectado al rendimiento quirúrgico (porcentaje de tiempo de quirófano utilizado del total de tiempo disponible), de modo que el dato global de todos los hospitales del SALUD cae 0,86 puntos en el año 2020, para luego incrementarse en casi 2,5 puntos en el año 2021, pasando del 64,38% a 66,86%.