La Diputación de Teruel, como todos en este año tan atípico, ha tenido que adaptar su labor de ayuda y apoyo a los ayuntamientos a las necesidades cambiantes, porque la llegada del coronavirus obligó a repensar toda la planificación anual. Un año después de que se detectaran los primeros casos en la provincia, el presidente y el vicepresidente de la institución, Manuel Rando y Alberto Izquierdo respectivamente, han hecho balance destacando que la Diputación se ha adaptado a esta situación extraordinaria reforzando el asesoramiento, las ayudas directas y los servicios esenciales en los municipios, para llegar donde no llega nadie.
Rando ha recordado las primeras decisiones cuando se declaró el estado de alarma en el que “el objetivo fundamental fue velar por la salud de todos los turolenses” pero después vemos que “está habiendo consuencias serias por lo que hay que apoyar a los sectores económico damnificados, también a través de las entidades sociales apoyar a las personas y las familias más vulnerables”. Y el presupuesto de la institución “lo pusimos a disposición de los afectados por la pandemia” y también los remanentes y las inversiones “van a servir como revulsivo para superar esta grave crisis”.
“Ha sido un año difícil 2020 y 2021” ha dicho Alberto Izquierdo pero “la Diputación cumple mejor que nunca su papel de llegar donde no llega nadie, resuelve los problemas que otras administraciones no pueden resolver” y ha citado no solo el apoyo a ayuntamientos en su día a día sino también otros sectores como las ganaderías de lidia. En este sentido ha destacado el Plan de Obras y Servicios, que permitirá “cubrir inversiones que los ayuntamientos han hecho desde el 1 de enero de 2020”, y todos los planes con partidas económicas extraordinarias para apoyar a los consistorios.
En un primer momento los esfuerzos se centraron en dar apoyo a los ayuntamientos, estableciendo un sistema de comunicación directo con ellos a través del teléfono, la web y reforzando las áreas que más necesitaban: la limpieza en calles y espacios públicos con la colaboración del Servicio de Extinción y Salvamento, el reparto de material sanitario o la teleasistencia domiciliaria, que se reorganizó para atender telefónicamente a sus más de 1.600 usuarios e incorporó a los que estaban a la espera.
Desde entonces, la labor de desinfección que los bomberos realizaron en espacios sensibles de los municipios, como centros asistenciales o de salud, fue un gran apoyo para los pueblos durante la pandemia. Después, el objetivo fue reorganizar el presupuesto para ampliar planes fundamentales para los ayuntamientos, como el Plan de Empleo o el de Concertación, que se elevó en un millón de euros.
Las restricciones por la pandemia obligaron a suspender las actividades culturales y deportivas que la institución provincial apoya en la provincia, como un pilar fundamental para vertebrar el territorio, por lo que se impulsaron iniciativas para, en la medida de lo posible, apoyar al sector cultural y continuar prestando este servicio en los pueblos. El Festival OnlineFest que se puso en marcha durante el confinamiento se mostró como un escaparate en la red para los artistas, y ciclos como “Cultubral” o “Alcañiz Lee” han animado el sector cultural y llevado la cultura por los pueblos de la provincia.
Además, en cuanto comenzó la desescalada se puso en marcha una potente campaña turística tanto para el exterior como para que los turolenses conocieran mejor su provincia y contribuyesen a revitalizar la economía. Así, con el lema “Vuelve a sentir Teruel. Juntos hacemos provincia” se lanzó esta campaña en medios de comunicación, y además se sortearon descuentos de 30 euros en 3.000 noches de alojamientos turísticos para fomentar la movilidad en la provincia. Una campaña en la que la Diputación invirtió 90.000 euros que sirvieron directamente para apoyar al sector turístico de la provincia, al tiempo que sirvió para premiar a los ciudadanos que contribuían con sus acciones a activar la economía circular.
También se decidió duplicar la partida que se destina a la promoción de los productos agroalimentarios de calidad, de 5.000 a 10.000 euros con cada una de las ocho organizaciones con las que colabora la DPT, cantidad que se ha mantenido este 2021.
Pero el virus sigue ahí, y las consecuencias no solo sanitarias sino también económicas han obligado a todos a adaptarse. Por eso desde la Diputación animan con campañas como la que lleva por lema “Cuídate, cuídanos” a ser prudentes ante la covid-19 pero también a consumir en la provincia para ayudar a dinamizar a algunos de los sectores más afectados, como son los de la cultura, el ocio o el turismo, entre otros.
Presupuesto de 2021
El presupuesto de este 2021, con cantidades históricas tras la suspensión de las reglas fiscales, está muy condicionado por la pandemia, con planes muy importantes para apoyar a los ayuntamientos y convocatorias específicas para ayudar a sectores como las convocatorias de ayudas a la ganadería de reses bravas, que ascenderán este año 180.000 euros, o al sector cultural, para el que está previsto dedicar en distintas líneas más de 700.000 euros. También se contemplan partidas específicas para apoyar a la hostelería, con 500.000 euros, o para promocionar el termalismo, con 50.000 euros, y el esquí, con 40.000.
Además,desde el equipo de gobierno destacan la partida específica que la institución provincial destina a un convenio con el Gobierno de Aragón y el resto de las diputaciones provinciales por el que ha aportado este año un millón de euros para actuaciones de apoyo al comercio, turismo, trabajadores autónomos y emprendedores, promoción de empleo, apoyo a pymes del ámbito cultural y protección y promoción social.
También apuntan que la Diputación atenderá las peticiones del ejecutivo aragonés en lo que precise y ya se ha comprometido a aportar el 20% de lo que suponga el Plan Remonta para dar trabajo a los afectados por el cierre de las estaciones de esquí en la provincia de Teruel.
El presupuesto contempla, además, una partida específica de 150.000 euros para gastos propios derivados de la adaptación a la pandemia, como la compra de mascarillas y material de protección para empleados y ciudadanos de la provincia cuando sea necesario.
En el presupuesto se ha incrementado notablemente la partida del Plan de Contingencia, hasta 1.240.000 euros, con un anexo específico en el que se contemplan líneas de ayuda habituales de la institución. Este fondo recoge el dinero previsto para desarrollar decenas de actuaciones especialmente sociales y culturales que aún están amenazadas por la situación epidemiológica. Se incluyeron en este capítulo, precisamente, para poder incorporarlas de una forma más ágil en sus propias partidas al presupuesto en cuanto se pueda, en aquellas áreas cuya ejecución estaba condicionada por la pandemia.
Es el caso, por ejemplo, de la partida de 18.000 euros destinada a subvencionar el fomento del deporte femenino o la de 3.000 euros que permitirá convocar los tradicionales concursos de pintura y de narración San Jorge 2021 dirigidos a centros educativos, o los 150.000 euros para el Plan de Emergencias que ya se aprobaron en el pasado pleno ordinario del mes de febrero.