El portavoz del grupo parlamentario de Ciudadanos en Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente en las Cortes de Aragón, Ramiro Domínguez, ha pedido este viernes al consejero del ramo que impulse nuevas zonas de regadío en la comunidad, teniendo en cuenta el actual contexto de guerra que afecta “a los dos principales graneros del mundo”, Rusia y Ucrania. “Desde Rusia, por las sanciones impuestas, no podremos traer cereal y Ucrania, por el ataque injustificado de Putin, verá mermada su producción”, ha observado.
En su interpelación al consejero en el pleno de las Cortes, el parlamentario liberal ha reconocido la labor de Olona en materia de modernización de regadíos, con una inversión de 124 millones desde la consejería. “En modernización de regadíos estoy relativamente satisfecho de la labor que ha hecho, pero ¿para cuándo nuevos regadíos?”, ha preguntado Domínguez. El Gobierno central ha apostado por la modernización, con 35 millones para las comunidades de regantes de Molinar del Flumen y Bardenas, pero en este último caso “hace falta diálogo, porque se está enquistando el problema, y una buena modernización de regadíos es lo mejor que le puede pasar al campo, pero no una sin explicar”. Se ha referido al embalse de Santolea, que está “prácticamente terminado” y que, además del abastecimiento de agua de boca y la regulación del río Guadalope, beneficiaría la modernización de regadíos, así como ha mencionado Mularroya y la zona de Valdejalón.
No obstante, para los nuevos regadíos “vamos a tener problemas”, ha estimado, al advertir de que “la primera que no está de acuerdo con ello es la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, y los segundos sus socios, CHA, Podemos e IU, todos en contra de las obras de regulación”. “Dentro de su gobierno hay una contestación importante a la regulación y creación de nuevos regadíos” y también desde el ministerio con una ministra “que es socialista, no comunista”, ha recalcado.
Por ello, ha pedido al consejero que “haga ver” a la ministra que los nuevos regadíos son fundamentales” para luchar contra la despoblación, y así lo están reivindicando en las comarcas de Calatayud, Tarazona, Caspe, Bajo Aragón o Jiloca, entre otras, solicitando también que se apueste por los regadíos a mil metros, que contribuirán al desarrollo de determinadas zonas. “Los regadíos son una pieza vital en Aragón y, en este contexto, son fundamentales”, ha concluido.