El Ayuntamiento de Zaragoza tiene previsto potenciar el Plan de Arbolado Urbano a lo largo de 2024, una iniciativa que ha resultado en la plantación de 10,980 nuevos árboles en la ciudad desde su inicio en 2020. Una de las recientes intervenciones se llevó a cabo en el distrito de Torrero, donde en el último año se han reposicionado más de 750 ejemplares, con 140 de ellos plantados en las últimas semanas.
De los 140 nuevos árboles en Torrero, 93 se han ubicado en alcorques vacíos en aceras, específicamente en calles como Ateca, Castillo de Loarre, Cuarte, Ejea de los Caballeros, Hogar Cristiano, Luis Ginés Lalana, Mallén, Venecia, Faustino Casamayor, Alquézar, Magallón y Jenaro Checa. Estas reposiciones no solo buscan mejorar la estética urbana sino que también están aprovechando para automatizar el sistema de riego en varias calles, optimizando la gestión del arbolado y reduciendo el consumo de agua.
La consejera de Medio Ambiente y Movilidad, Tatiana Gaudes, resaltó la eficacia del Plan de Arbolado Urbano al revertir la pérdida significativa de árboles experimentada en la última década. Gaudes indicó que solo en 2023 se ganaron 1,745 ejemplares netos. La gestión anual del arbolado urbano es esencial para garantizar la seguridad y abordar problemas como inclinaciones, caídas por viento, ejemplares muertos o afectados por plagas, así como intervenciones necesarias debido a obras o interferencias con instalaciones de servicios.
La estrategia de gestión se centra en plantar especies más adecuadas al entorno urbano y a las condiciones específicas de Zaragoza. Las últimas reposiciones en Torrero incluyeron arces, álamos, acacias, tamariscos, árboles del paraíso y moreras sin fruto. Además, se extendieron plantaciones al Parque de la Paz y el paseo de Enrique Tierno Galván, añadiendo 47 nuevos árboles. La diversidad de especies y la mejora progresiva de la biodiversidad del arbolado son parte integral de la nueva gestión del arbolado en la ciudad.
El presupuesto municipal para Parques y Jardines asciende a 29 millones de euros en 2024, un 8.7% más que en 2023. Gaudes destacó que, dentro de la gestión del arbolado, la implementación de la nueva contrata de conservación ha permitido duplicar la frecuencia de los ciclos generales de poda, pasando de realizarse cada ocho años a cada cuatro años. La iniciativa busca no solo fortalecer la presencia verde en la ciudad sino también promover un entorno sostenible, diverso y seguro.