Zaragoza en Común denuncia la falta de transparencia en las obras de la Plaza Salamero

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El grupo municipal de Zaragoza en Común en el Ayuntamiento ha denunciado la falta de transparencia y vulneración de la Ley de contratación pública en la que está incurriendo el Gobierno de PP-Cs al no publicar en el portal de transparencia municipal los contratos de emergencia adjudicados por el área de urbanismo.

En concreto, Zaragoza en Común ha pedido conocer los contratos relativos a las obras de la Plaza Salamero, tanto los contratos de emergencia como el iniciado en marzo, ya que en la licitación para adjudicar la auditoría del parking no existe información publicada en la página web sobre el resto de las ofertas de las nueve empresas que se presentaron.

Desde la formación, han criticado “la total falta de transparencia” de PP-Cs, pese a que la Ley de Contratos del Sector Público establece en su Artículo 154 que “la formalización de los contratos deberá publicarse, junto con el correspondiente contrato, en un plazo no superior a quince días tras el perfeccionamiento del mismo en el perfil de contratante”. 

De igual modo, esta situación se ha dado en otras ocasiones; como en el caso de la contratación por emergencia de las obras de los presupuestos participativos en los Colegios Públicos. En este caso, se optó por la fórmula de “contrato de emergencia” y el consejero de Urbanismo no informó de a qué empresas se había adjudicado, tan solo aportando que se había dado prioridad a empresas aragonesas y, al solicitar el expediente desde el Grupo Municipal, el resultado fue la contratación de SACYR, Ferrovial y Moncobra, y otras dos empresas que sí son aragonesas (Arasfalto y Obras y Promociones Villahermosa).

Incumplimiento de la Ordenanza de Protección de Arbolado Urbano en Plaza Salamero

Desde Zaragoza en Común han criticado que, desde que se conoció en el mes de enero la aparición de una grietas en el techo del parking de la Plaza Salamero, “todo han sido incógnitas alrededor del futuro de la Plaza y la treintena de árboles que la poblaban”. En un primer momento, desde el gobierno de PP-Cs se trasladó la intención de realizar un informe por parte de los peritos municipales sobre el estado del parking, informando sobre la afectación del mismo y las posibles causas, es decir, una actuación propia del área de urbanismo y que debido a las afecciones económicas y medioambientales, debería haberse realizado con recursos municipales.

Finalmente, el consejero decidió sacar a licitación como contrato menor el ‘Estudio y redacción de Informe de auditoría del aparcamiento subterráneo Salamero y CesarAugusta’, con el objetivo de evaluar los daños en el parking  y sus causas con fecha de 10 de marzo, justo antes de la declaración del Estado de Alarma, lo que conllevó el retraso en la adjudicación del contrato, que fue adjudicado finalmente el 25 de junio. De  nuevo, los criterios de adjudicación de este contrato no se conocen y tampoco se recoge en la página web municipal el resto de ofertas de las nueve empresas que se presentaron.

Tan solo 6 días después de esta adjudicación, se aconsejó contratar obras de apuntalamiento. El gobierno ejecuta esta recomendación, por la vía del contrato de emergencia, y las obras comienzan el 1 de julio. Un mes después, se talan los árboles. Sin embargo, dicha auditoría no aseguraba que el causante de los daños fuera el peso.

Zaragoza en Común también denunciado el incumplimiento de la Ordenanza de Protección de Arbolado Urbano en las obras de la plaza Salamero. Dicha ordenanza exige que existan “probados motivos” para acometer una tala. Desde la formación aseguran no entender “las prisas de PP-Cs en acometer esta tala masiva”.

En concreto, Zaragoza en Común denuncia el incumplimiento del Artículo 9 de la ordenanza que establece que, a la hora de acometer la reforma de una zona verde, el proyecto de obra debe prever medidas de protección y de reposición del arbolado afectado.

También se está incumpliendo el Artículo 7: “Cuando se realicen obras que puedan afectar al arbolado se deberán adoptar medidas de protección necesarias para evitar daños en tronco, raíces y ramas”. Un aspecto que no se está cumpliendo en el caso de los olivos, que se han encontrado desprotegidos durante el desarrollo de la obra, sin riego, ni protección.