En el Real Zaragoza, a pesar de la situación de estado de alarma por la pandemia del Covid-19 que ha obligado a detener el trabajo presencial en los sectores no esenciales, continúa la actividad, sin embargo, en ciertos ámbitos que es necesario mantener para asegurar una vuelta a la normalidad, cuando esta se produzca, con los menores trastornos posibles.
Uno de esos ámbitos es el del mantenimiento del césped del estadio de La Romareda, al que es necesario seguir procurando los cuidados habituales para que no se estropee durante el período que dure la situación de confinamiento. Esta tarea la llevan a cabo los jardineros del Club, cumpliendo las tareas que les encomienda la empresa SIAVER, encargada del mantenimiento del césped.
También por indicación de LaLiga, estos cuidados se siguen llevando a cabo diariamente a cargo Paco Corrales y José Luis Calvo quienes, manteniendo las medidas de seguridad indicadas por las autoridades, continúan desarrollando su actividad profesional para que la hierba del estadio municipal siga manteniendo su habitual calidad, reconocida por todos los equipos que lo visitan.
«Nuestra labor es el mantenimiento del césped y en estos momentos que no hay competición, lo tratamos a base siegas, riegos, fertilizantes y productos fitosanitarios, para evitar el desarrollo de enfermedades», señala José Luis Calvo. «Lo importante ahora es prevenir enfermedades y la aparición de las malas hierbas», añade Paco Corrales, que trabaja junto a su compañero con el objetivo de que «cuando empiece la competición, el césped esté en condiciones», como es norma habitual en el feudo zaragocista.
Asimismo, también siguen adelante las labores de mantenimiento del césped de los campos de entrenamiento de la Ciudad Deportiva -también bajo el control de SIAVER-, con el objetivo de que estos se mantengan también en las mejores condiciones posibles para cuando sea posible la vuelta a los entrenamientos del primer equipo del Real Zaragoza.
