Emir Sulejmanovic se ha convertido en la segunda incorporación del equipo de Porfirio Fisac después de la llegada de Trae Bell-Haynes. El nuevo jugador de Casademont Zaragoza llega al club de la rasmia para potenciar el juego interior, acompañado del ya renovado Borisa Simanic.
El ala-pívot bosnio con pasaporte finlandés aterriza en Zaragoza dispuesto a aportar esa dosis de veteranía, imprescindible en la Liga Endesa, una categoría que ya conoce muy bien. De hecho, este es su décimo año jugando en España.
Llegó a la península en la temporada 13-14 con el filial del FC Barcelona. Tres años después ficharía por el Cibona de Zagreb. Tan solo un año más tarde volvía a España, sin billete de vuelta. Breogán en dos ocasiones, Fuenlabrada, Bilbao en dos etapas y Lenovo Tenerife son los equipos en los que ha militado el jugador bosnio. Durante este último año, en su segunda etapa en las filas de Surne Bilbao, promedió 20 minutos por partido, 7.3 puntos, 6.1 rebotes y una valoración de 9.1, logrando ser un jugador clave en el equipo dirigido por Ponsarnau.
También es un habitual en las convocatorias de la selección bosnia, con la que ha disputado los clasificatorios para los Mundiales y Eurobasket de los últimos años. Además, participó en el Eurobasket de 2022.
Porfirio Fisac ha querido recalcar la importancia de la incorporación de un jugador con sus características: “Buscábamos un cuatro que tuviera energía, fuerza en el rebote, capacidad de poder abrir el campo. Es un tipo de jugador que agrada mucho en Zaragoza y que nos da una contundencia en cuanto a un esfuerzo en la posición de cuatro. Es un hombre con hambre, con necesidad de crecer y nos marca el camino que queremos en el club”.