El Gobierno de Aragón, a través del director general de Interior y Emergencias, Miguel Ángel Clavero, ha solicitado extremar las precauciones ante las altas temperaturas previstas para este viernes y sábado. Clavero ha enfatizado la necesidad de «precaución, sentido común y autoprotección» debido a las temperaturas elevadas, y ha recordado que sigue activa la alerta roja por riesgo de incendios forestales en la región.
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido un aviso de nivel naranja para el valle del Ebro, centro y sur de Huesca y la Ibérica zaragozana, mientras que el resto de Aragón se encuentra en nivel amarillo. Clavero ha instado a los ciudadanos a adoptar medidas preventivas para evitar golpes de calor, especialmente en personas mayores y niños, y a evitar actividades al aire libre durante las horas más calurosas del día. Además, ha pedido seguir las recomendaciones de autoprotección ante altas temperaturas.
La alerta roja por riesgo de incendios forestales exige también extremar las precauciones en labores agrícolas y actividades en espacios naturales. Clavero ha subrayado que, con las altas temperaturas, el riesgo de incendios es muy alto. Protección Civil de Aragón ha solicitado a los ciudadanos seguir las recomendaciones de autoprotección y, ante cualquier síntoma grave de golpe de calor o la presencia de humo o fuego en el monte, llamar al 112.
Como medida general, Protección Civil ha alertado a alcaldes, presidentes comarcales, ayuntamientos, comarcas, grupos operativos, voluntarios de Protección Civil y delegaciones territoriales del Gobierno de Aragón. Además, se han emitido una serie de consejos de autoprotección ante las altas temperaturas, destacando la importancia de mantener a los mayores y niños bien hidratados, evitar la exposición al sol durante las horas más calurosas y no realizar actividades que requieran esfuerzo físico considerable sin una hidratación adecuada.
También se han dado recomendaciones específicas ante incendios forestales, como no hacer fuego en el bosque, no arrojar colillas y, en caso de fuego pequeño, atacarlo por la base con agua o tierra. En caso de encontrarse rodeado por las llamas, se recomienda situarse en la zona ya quemada y huir en dirección opuesta al humo.
