Los 124 centros de salud de Aragón han implementado el botón del pánico, también conocido como dispositivo de alerta de agresiones. Este sistema permite a los profesionales sanitarios notificar rápidamente a sus compañeros en caso de sufrir una agresión, ya sea verbal o física. La medida busca mejorar la seguridad en los centros de salud y garantizar un entorno de trabajo más protegido.
Desde su lanzamiento en 2019, la instalación de estos dispositivos se ha ampliado significativamente en los últimos dos años. Actualmente, el sistema está disponible en 452 puestos del sector sanitario Zaragoza I y en 730 del Zaragoza II. Además, se ha implementado en Urgencias, consultas externas y servicios de atención al paciente en áreas con alta incidencia de agresiones.
La instalación también está prevista en los centros médicos de especialidades de Zaragoza y se está llevando a cabo en otras localidades como Huesca y Alcañiz. Para las visitas domiciliarias, se ha introducido un sistema de geolocalización en los sectores de Zaragoza y Huesca, con planes de expansión a otras áreas.
Desde abril, se han reforzado otras medidas de seguridad, como la presencia de guardias de seguridad en 29 centros de salud de Aragón. También se han instalado cámaras de seguridad en 17 centros para mejorar la vigilancia.
Ana Castillo, gerente del Servicio Aragonés de Salud, ha condenado cualquier forma de violencia y ha reafirmado el apoyo a los profesionales afectados. Castillo destacó el respaldo a través de los Servicios de Prevención y asistencia jurídica para quienes lo requieran.
Además, se ha creado una Mesa Técnica de Agresiones para analizar y seguir de cerca los casos de violencia. Esta mesa, compuesta por expertos en Prevención de Riesgos Laborales y representantes de los trabajadores, propone medidas para reducir las agresiones.
María Antonia Contreras, jefa de servicio de Prevención de Riesgos Laborales, detalló las nuevas iniciativas en desarrollo. Estas incluyen la creación de entornos de trabajo libres de violencia y la capacitación continua para los trabajadores y mandos intermedios.
Hasta el 31 de julio, se han registrado 467 agresiones en centros sanitarios de Aragón, con una mayor incidencia en la atención hospitalaria. El aumento en el número de casos notificados puede deberse a mejoras en los procedimientos de comunicación y a una mayor formación del personal.
