El Ayuntamiento de Zaragoza ha cerrado el año 2024 con la deuda más baja en casi cuatro décadas, situándose por primera vez desde 1986 por debajo del 75% de los ingresos municipales. Este avance permitirá que la ciudad deje de estar bajo la tutela financiera del Gobierno de Aragón.
Según informó la alcaldesa Natalia Chueca, la deuda municipal ha bajado un 31% desde junio de 2019, pasando de 830 millones de euros a 571 millones en 2024. Solo en el último año, se ha reducido en 32 millones de euros. Este saneamiento ha sido posible gracias a la estrategia de control financiero y refinanciación de préstamos.
Un dato clave en esta mejora es la disminución del ratio de deuda viva sobre los ingresos corrientes, que ahora se sitúa en el 71%. Desde 2013, los municipios con un nivel de endeudamiento superior al 75% están obligados a contar con la supervisión del gobierno autonómico para cualquier operación de financiación a largo plazo.
Además del descenso en la deuda global, el alivio para el habitante ha sido significativo. Cada ciudadano de Zaragoza debe ahora 48 euros menos que el año pasado.El Ayuntamiento ha combinado este proceso de saneamiento con un aumento de la inversión en proyectos estratégicos para la ciudad y un refuerzo de las políticas sociales. En este sentido, se han logrado récords históricos en tres aspectos clave: el mayor presupuesto municipal registrado, la menor carga fiscal para los ciudadanos y la menor deuda.
Otro de los logros destacados es el ahorro en intereses de la deuda. Para 2025, el Ayuntamiento prevé gastar 9,2 millones de euros menos en este concepto, gracias a la refinanciación de préstamos antiguos contratados en condiciones menos favorables. Estas operaciones han permitido reducir los sobrecostes financieros que la ciudad ha arrastrado durante los últimos 20 años.
Con estos avances, Zaragoza cierra una etapa de alta deuda y entra en una fase de mayor estabilidad financiera, con más capacidad para invertir en el futuro de la ciudad sin comprometerse.
