El técnico de Casademont Zaragoza destaca la gran entrada al choque como el principal factor en la victoria de su equipo en el duelo directo frente a RETAbet Bilbao Basket. El argentino alaba el ritmo de juego de sus pupilos y reconoce que los vascos hoy no estuvieron acertados, en parte también por las ayudas defensivas del cuadro maño, que parece que comienza a encontrar su mejor versión.
ASÍ LO VIO SERGIO HERNÁNDEZ
«Ha sido un partido que nos encontró muy en forma de entrada. Hicimos una combinación de defensa y ataque excepcional en el primer tiempo, los sacamos de su juego. No pudieron ni siquiera hacer uso de su scouting, que tenían preparadas cosas especiales. Tuvimos un ritmo muy alto y ellos una efectividad muy baja en un momento clave. Eso nos permitió correr mucho, nos alimentó nuestra energía, defendimos duro las líneas de pase, cortamos balones y se dio un partido que se da muy pocas veces. Cogimos muy rápido 20 puntos de diferencia y después controlamos el juego, mientras ellos hicieron lo que pudieron. Esa es la realidad. A veces te toca vivirlo desde el otro lado. No es que Bilbao sea un mal equipo o nosotros los campeones de la NBA, simplemente hoy se dio así. Lo aprovechamos, nos fuimos creciendo en el juego. Tuvimos dos minutos que bajamos un poco la energía, al iniciar el segundo tiempo, pero era bastante normal que nos sucediera».
Las ayudas en defensa
«La clave está siendo que estamos ayudando menos que antes. Defendemos mejor los unos contra uno y no requerimos de tantas ayudas. Cuando uno defiende duro, bien, mejora la defensa de los bloqueos indirectos, del poste bajo, del uno contra uno… y ahí solo aparecen las ayudas en el momento correcto, en el momento justo. Antes ayudábamos más y eso era un problema. Ahora ayudamos menos y, al hacerlo menos, indica que la defensa es mucho mejor. Hay que seguir trabajando, mañana volvemos a entrenar. El basket es un juego lógico, si un equipo va creciendo y juega mejor, es porque está encontrando una identidad que quizá no tenía».
Mejora en los últimos partidos
«Yo creo que es porque somos un equipo al que nos gusta trabajar. Todos los días estamos buscando una vuelta para mejorar nuestro juego. Somos muy competitivos y no hay egoísmo. También sucedía lo mismo cuando perdíamos, pero quizá cuando eso sucedía no teníamos esa concentración y confianza en nosotros mismos. Lo dije desde que llegué: lamentablemente no ganábamos, pero cada vez que venía el equipo en el día a día estaba súper comprometido y responsable, entrenaba muy duro. La llegada de Bray también ha sido clave, al igual que algunos aspectos tácticos que hemos modificado. Unos sistemas para tener menos el balón en las manos, para que todo el mundo participe, jugando más abiertos y encontrando a los grandes. Hlinason y Thompson están teniendo un nivel muy alto y eso hace que seamos un equipo preocupante para los rivales».