Más de 250 autónomos o empresas culturales aragonesas han sido receptoras de las ayudas impulsadas por el Gobierno de Aragón para apoyar al sector cultural de la Comunidad Autónoma. El consejero de Educación, Cultura y Deporte, Felipe Faci, y el director general de Cultura, Víctor Lucea, han adelantado esta mañana la resolución de las convocatorias financiadas por el Gobierno, cuyo objetivo es el de apoyar a las empresas que desarrollan su actividad en el sector de la Cultura y tratar de paliar las consecuencias que la pandemia ha tenido sobre el desarrollo de su actividad.
El Departamento de Educación, Cultura y Deporte ha concedido un total de cuatro millones de euros en ayudas correspondientes a las líneas de fomento y apoyo a proyectos culturales (2,5 millones de euros), una línea extraordinaria de ayudas a autónomos y empresas de la cultura (968.000 euros) y una línea de subvención de 500.000 euros para programas y actuaciones específicas, alineados con la información adquirida tras los numerosos encuentros realizados en este año con asociaciones y entidades de la Cultura.
Dentro de este presupuesto se enmarcan programas como el de plan de fomento de la lectura, adquisición de libros para apoyar al sector editorial, adquisición de obras de arte, programación cultural o la restauración de piezas de los museos. En el transcurso de una rueda de prensa que se ha celebrado esta mañana, el consejero ha explicado que “respondiendo al compromiso del Gobierno de Aragón con la Cultura, todas las líneas y programas han sido lanzados”. “Desde el comienzo de la pandemia, y dentro de la reestructuración del presupuesto realizada para apoyar a los sectores más afectados, el Gobierno de Aragón tuvo claro que la cultura es un sector esencial. Lo es siempre e incluso más en tiempos difíciles, cuando nos acompaña y nos ayuda”, ha declarado.
En este sentido, Felipe Faci ha informado asimismo que la línea extraordinaria de ayudas, dotada con casi un millón de euros, se publicará mañana, miércoles 30 de diciembre, en el BOA. Esta convocatoria establecía diferentes rangos de ayudas en función del número de trabajadores y de la existencia o no de espacio físico que mantener. Las subvenciones oscilaban entre los 1.000 y los 15.000 euros, en forma de ayudas directas, las más elevadas que el Gobierno de Aragón ha concedido de este tipo durante la crisis COVID. De las más de 600 solicitudes presentadas, la Dirección General de Cultura ha resuelto a favor de 252 empresas.
El 68,07% de las ayudas corresponden a empresas radicadas en Zaragoza mientras que las de Huesca han recibido un porcentaje del 18,70% del total y las de Teruel un 13,23%. Por el tipo de destinatarios, las ayudas se han repartido entre empresas y autónomos de la Cultura (84%), entidades locales a través del programa RAEE (9%), y a entidades sin ánimo de lucro, como asociaciones o fundaciones (7%).
El director general de Cultura, Víctor Lucea, ha informado además de que con el trabajo realizado desde el Departamento se han podido ejecutar 593 acciones de apoyo a la Cultura. Por lo que respecta a la distribución de las ayudas, la mayor cuantía, 329.000 euros, se ha distribuido a 47 empresas que cuentan con hasta cuatro trabajadores a su cargo y con local; seguidas por 59 empresas con hasta cuatro trabajadores y sin local, que han recibido 295.000 euros.
Por lo que respecta a los autónomos, 90 de ellos sin local ni trabajadores a cargo se han repartido un total de 89.750 euros, mientras que otros 42 autónomos con local o trabajador a cargo han recibido un total de 84.000 euros. Durante su comparecencia, Felipe Faci se ha referido también a los principales ejes de la política cultural del Gobierno de Aragón, que se basan tanto en el derecho a la creación como en el derecho de acceso a la cultura.
De esta manera, el Ejecutivo reconoce sus capacidades como motor económico y vehículo para difundir la marca Aragón y potenciar la visibilidad de los creadores aragoneses fuera del ámbito territorial. Por lo que respecta al derecho a la creación, el Departamento muestra especial atención tanto a la realidad del sector como a la del asociacionismo cultural con el objetivo de sentar las bases de una verdadera industria cultural aragonesa. En esta dirección, ha anunciado el establecimiento de marcos de regulación favorables a la creación y a la realidad del sector a través de una Ley de Cultura que ya se está empezando a redactar.
Además, se van a modificar las bases reguladoras de las ayudas para atender a criterios como la plurianualidad o la subvención a artistas de la tierra que viven fuera de la Comunidad. Por otra parte, para contribuir al sostenimiento de las empresas culturales y de la actividad, el Departamento prevé llevar a cabo un trabajo de posicionamiento de la cultura aragonesa, acudiendo a ferias sectoriales a nivel institucional y apostando por líneas de internacionalización.
