Paso atrás de la SD Huesca al caer por la mínima ante el Alavés (1-0)

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La Sociedad Deportiva Huesca cayó por la mínima en Mendizorroza en el minuto 85, en un encuentro igualado ante el Deportivo Alavés (1-0) en la 33ª jornada de LaLiga Santander. En un choque sin grandes ocasiones, lo decidió Battaglia en el tramo final con un golazo ante el que poco se pudo hacer. Pudo enmendarlo Escriche casi con el tiempo cumplido, pero lo evitó el larguero. A pesar del golpe, los resultados de los rivales y el partido pendiente del Real Valladolid mantienen a los azulgranas fuera de los puestos del descenso, en un triple empate a 27 puntos.

Los minutos iniciales fueron de máxima exigencia, con un rival que hacía valer su condición de local y buscaba poner fin a una larga racha de encuentros sin conocer la victoria. Además de apretar la salida de balón oscense, explotaron las jugadas a balón parado como córners y faltas laterales para inquietar la meta de Andrés Fernández. Pero la zaga azulgrana estuvo sólida, comprometida y solidaria para no ceder ante el empuje local. De hecho, en el primer periodo no tuvo que hacer intervenciones el portero murciano, pero sí el de los oponentes. En el minuto 25, un balón suelto en la frontal lo aprovechó Denis Vavro para pegar un derechazo potentísimo hacia la base del palo izquierdo, que fue repelido in extremis por Pacheco, salvando el 0-1. Poco después Sandro tuvo otra oportunidad, con un amago y tiro en el área que pegó en la mano del defensor Tachi, pero el colegiado y el VAR no consideraron oportuno revisar la acción. Sin grandes ocasiones hasta el descanso, la más clara había sido de los altoaragoneses.

El segundo tiempo trajo un gran susto al Huesca: cabezazo al larguero de Joselu tras un córner. A pesar de esa acción, a partir de entonces los de Pacheta ganaron peso en campo contrario y comenzaron a dominar más a través de la pelota. Las oportunidades siguieron escaseando en ambas escuadras, aunque en el minuto 73 se anuló un gol a Lucas Pérez por fuera de juego, después de una buena parada de Fernández. Primero con Sergio Gómez y después con un triple cambio dando entrada a Doumbia, Mikel Rico y Escriche, se buscó un aire nuevo al equipo. Pulido la tuvo con un cabezazo en una falta lateral, cuando el tiempo comenzaba a agotarse y los nervios por ambos costados podían sentirse. En el 85 llegó el golazo inapelable de Battaglia, un mazazo grande para esas alturas del partido. Aun así, pudo empatar la SD Huesca si no fuera por el larguero de Escriche después de un centro medido de Pedro López.