Acuerdo en las Cortes de Aragón para trasladar al Gobierno de España la necesidad de que siga buscando soluciones para mitigar y compensar el elevado precio de la luz que tienen que soportar los consumidores, autónomos y pymes y, en segundo lugar, para comprometer al Gobierno aragonés con el estudio y en su caso aprobación de un plan de ayudas para pymes, autónomos y consumidores para compensar el aumento de los costes energéticos en su negocios.
Sobre la base de una propuesta del Partido Popular defendida esta tarde en la sesión plenaria por el portavoz económico del Partido Popular, Javier Campoy, el Parlamento en su conjunto reconoció el fuerte impacto negativo que el sustancial incremento del precio de la energía eléctrica está generando en particulares y empresas y, en consecuencia, la obligación de aplicar medidas extraordinarias.
El contexto, describió el diputado en su intervención, está marcado por la subida de la cesta de la compra en productos básicos como consecuencia de la factura energética, la preocupación creciente en los hogares sobre el aumento de los costes de la calefacción en invierno o el anuncio de paros y de activaciones de ERTE en la industria aragonesa. Trasladado a cifras, el precio de la luz ha subido si se compara con el mismo mes del año pasado más del 195% lo que significa que el gasto que soportaban los hogares y las empresas españolas en agosto de 2020 y lo que pagaron en agosto de 2021 también se incrementó el 195%.
Como ejemplos más concretos de las repercusiones perjudiciales detalladas por Campoy están los autónomos que deben afrontar esas subidas en sus hogares y en sus negocios, “estamos hablando de duplicar o triplicar el precio de la luz y un taller mecánico está en el cuádruple con respecto al año pasado” explicó, “cuatro de cada cinco autónomos su principal problema hoy es el precio de la luz, un millón de autónomos en toda España fijan el precio de la luz como su principal problema”, pero también afecta a empresas de mayor tamaño que ya han anunciado la imposibilidad de seguir produciendo con unos costes energéticos tan elevados y todavía al alza.
Esta situación ha provocado una intensa caída de sus facturaciones a la que actualmente se añade un aumento de los costes que, en muchos casos, supone eliminar los estrechos márgenes con los que subsisten. Sectores como el comercio y la hostelería están especialmente afectados por la situación que ya vivían. La patronal Hostelería de España ha estimado que la energía representa entre el 8% y el 10% de los costes, por lo que una subida de un tercio puede provocar un aumento de entre el 2% y 3% de los gastos fijos en las empresas del sector.
Desde el principio de la crisis del precio de la luz los populares pusieron sobre la mesa soluciones y alternativas ante la inacción del Gobierno de España, “igual que hay un gasóleo barato póngase en marcha una electricidad bonificada y una reducción de tasas e impuestos a todos los ciudadanos, a todos los consumidores” y en esta línea propuso la creación de un ‘bono autonómico de la luz’ consistente en una ayuda del 20% de la factura sobre los consumos eléctricos de los últimos seis meses, “eso lo podemos hacer en Aragón y ser pioneros en ayudas a los consumidores, a los autónomos, a las pymes y en general a todos los aragoneses”. Una propuesta, recalcó, “para no dejar a nadie atrás, porque nos lo creemos”.
