La Federación de Empresarios del Metal de Zaragoza, FEMZ, continúa trabajando para conocer el impacto del aumento del precio de la electricidad en las empresas del sector.
Tras mantener el pasado martes una reunión con un grupo de compañías grandes consumidoras de energía ante el aviso de las eléctricas del incremento de sus tarifas pese a tener contratos establecidos; esta semana lo ha hecho con empresas de menor tamaño que, por sus características, se están viendo afectadas igualmente.
Los empresarios han denunciado el elevado coste adicional al que se está sometiendo a las empresas y la impotencia de no poder hacer nada para evitarlo. Pese a implantar medidas de eficiencia energética y ahorro de consumo, el tipo de actividad que realizan con máquinas 24 horas funcionando, por ejemplo, les está obligando a plantearse decisiones más radicales.
Paralelamente, FEMZ ha realizado una encuesta entre sus asociados de la que se desprenden datos muy preocupantes. El 92% de las empresas ha reconocido haber notado el aumento del precio de la electricidad en la factura. Como consecuencia, un 59% indica que deberá repercutir la subida en sus precios; un 5% reconoce que se plantea adoptar medidas drásticas como ERTEs o EREs; y un 3% advierte que, de continuar esta situación, puede suponer el cierre de su negocio.
Asimismo, un 59% de las empresas cuantifica el impacto de la subida del precio de la electricidad entre 5% y un 20% de sus costes; un 19% de las compañías lo cuantifica en menos del 5% de sus costes y un 13% entre el 20% y el 50% de sus costes. Respecto a las medidas que han adoptado o piensan adoptar para contrarrestar este alza, el 38% de las empresas habla de medidas de eficiencia energética; el 34% reconoce no haber tomado ninguna medida todavía; el 11% se plantea adaptar sus horarios de producción a los tramos más baratos; un 12% estudia utilizar otro tipo de energía o producir energía propia; y un 5% analiza reducir su producción.
Los empresarios, además, han alertado de los problemas que les están provocando las lecturas estimadas. Así, por ejemplo, son numerosas las empresas que han denunciado que han duplicado y hasta triplicado sus facturas de los meses de verano pese a estar de vacaciones y sin actividad alguna. Un problema al que cabe sumar el retraso en el envío de las facturas.
Por otro lado, el Comité Ejecutivo de la organización ha mantenido una nueva reunión en la que también se ha puesto sobre la mesa la inquietud ante las noticias que se están publicando sobre la reforma laboral. Los empresarios han expresado su preocupación ante dos aspectos que pueden provocar un desajuste organizacional importante en las empresas como la libertad para elegir horario laboral, pues distorsionaría cualquier planificación; y el límite del 15% en la contratación temporal, ya que sería insuficiente para un sector como el industrial en el que se tienen picos de trabajo estacionales.
Estos anuncios, de confirmarse, podrían lastrar seriamente la competitividad de las empresas teniendo en cuenta que el sector del Metal, más allá de las dificultades derivadas de la pandemia, está sufriendo problemas de desabastecimiento de materias primas y componentes, así como la ya mencionada subida en los precios de la electricidad.
