El estudio del yacimiento de Cabeza Ladrero, ubicado cerca de Sofuentes, en la Comarca de las Cinco Villas, sigue dando sorpresas y, recientemente, se ha descubierto una zona de enterramientos compuesta de túmulos cerca de Novellaco, en el término municipal de Sos del Rey Católico.
Esta zona se encuentra alejada del propio yacimiento, lo que también resulta curioso, pero que ayuda a afirmar que la extensión de los territorios que administró la ciudad de Cabeza Ladrero fue grande y que éstos “se extienden por otras zonas no conocidas y de las que no se sabía nada hasta este momento”, indica el director de la excavación, Ángel Jordán.
En época de Augusto hay una reorganización del territorio y se crean nuevos espacios para administrar el territorio, “sin darles categoría municipal, porque a los habitantes de estos pueblos se les exigían tributos y, por ello, tenían poner en cultivo más tierras y ampliar sus zonas de asentamiento, aquí podría estar la clave del hallazgo que hemos realizado”, dice el arqueólogo.
El hallazgo de este espacio funerario se ha producido porque desde el año 2015, el equipo de investigación de Cabeza Ladrero está metódicamente prospectando todo el territorio. “Se sacan fotografías aéreas y se va recorriendo, parcela por parcela, buscando restos y vestigios cuya cronología fecha entre el Neolítico y Alta Edad Media”, precisa Jordán.
En el transcurso de este trabajo, se encontró una zona llena de túmulos, una construcción hecha para albergar una tumba de incineración que alberga cenizas que se cubren con una montaña de piedras. Esta tipología “se da frecuentemente en la Edad del Bronce y la Edad de Hierro, pero lo que se conoce en las Cinco Villas sobre este tema es poco”, puntualiza el especialista.
Así, en el norte de la Sierra de Sos, cerca de Urriés, hay una zona con bastantes, pero, al sur, “solo se conocen tres necrópolis (corral de Mola, en Uncastillo, con cinco túmulos, parcialmente excavada, y las otras dos, de las que no hay datos, están en la zona de Gusal, entre Uncastillo y Layana, y otra en el termino de Ejea”, dice el arqueólogo.
VEINTE TÚMULOS
La necrópolis encontrada, situada cerca de la zona de Novellaco, contiene unos veinte túmulos que se ha identificado a vista de campo, algunos mejor conservados que otros.
Si bien, muchos de ellos están afectados por la vegetación y otros expoliados, abiertos por su parte superior para acceder al ajuar funerario, “algo que dificulta el proceso de identificación y catalogación”, indica Ángel Jordán.
Entre ellos los hay de diferentes tipologías: circular, ovalado, etc. y todos ellos de un tamaño de entre seis y ocho metros de diámetro.
El siguiente paso es realizar la fotogrametría de todos los túmulos para poder sacar la planimetría exacta. Esto ayudará a estudiarlos y, con sus datos, “esperemos cerrar ese vacío informativo que hay en este ámbito en esta zona. Esperemos poder desarrollar este trabajo a lo largo de año. Luego, con el permiso de Patrimonio se podrá valorar la opción de excavar para poner esta zona en valor”, puntualiza Jordán.
Además, este equipo arqueológico seguirá trabajando en la zona propia de Cabeza Ladrero. “A nivel de prospección se cruzará el canal y se terminará en el término municipal de Sos del Rey Católico, en paralelo a eso, seguiremos trabajando en la nueva zona de necrópolis encontrada”, concluye el director de la excavación.
