Desde el guardameta Álvaro Ratón hasta futbolistas de campo como Alberto Soro, Nieto, Igbekeme, Clemente, Álex Blanco o Dwamena –de baja-, y antes los cedidos Papu o Lasure… el Real Zaragoza cuenta con un puñado de futbolistas de perfil zurdo, alternativa de juego al que Víctor Fernández ha sabido sacar provecho por cualquiera de los dos flancos. Y que ha brindado equilibrio al juego e importantes rentas a la escuadra blanquilla.
El técnico ha habilitado a sus futbolistas en un lado u otro en función de sus condiciones, pero no únicamente por su dominio de una u otra pierna. Porque es habitual verlos jugar a pierna cambiada; sobre todo en las opciones de vanguardia. Pero no únicamente: por ejemplo El Yamiq se desenvuelve con solvencia como central zurdo cuando se trata de un futbolista diestro.
En posiciones más avanzadas, el juego en la banda natural te brinda la velocidad de futbolistas como Alex Blanco o Javi Puado en el flanco derecho. Y la prolongación de los laterales convierte a éstos en flechas indispensables en el juego de ataque de la formación blanquilla. No en vano, fue la fe de Nieto la que brindó a Luis Suárez la asistencia que selló la victoria en Málaga.
Pero es muy habitual que el técnico zaragozano aproveche las virtudes de Alberto Soro –o con anterioridad Papu o incluso Daniel Lasure- en una posición ‘antinatural’, por el lado contrario al de su pie bueno, sacando partido de su estilo de juego hacia dentro.
Y la banda izquierda es trillada también por diestros como Puado o Burgui, capaces de volver loca hacia la defensa encarando hacia un lado u otro, abriendo así las alternativas de juego.
Los frutos son llamativos: el zurdo Alberto Soro es, junto a Eguaras, el máximo asistente del equipo. Pero además, el conjunto aragonés ha logrado casi una tercera parte de sus goles con la pierna izquierda 14 tantos de 45 totales. De entre ellos, Suárez ha conseguido 5, Soro 2 y Dwamena 2 y han acertado también Kagawa, Nieto, Linares e Igbekeme.
La alternativa de brindar ambas bandas a los futbolistas sin distinción de ser diestro o zurdo no solo ofrece más opciones en las alternativas sobre todo de ataque; al mismo tiempo, con garantía de encarar hacia ambos lados del ataque, abre una sombra de duda en a la hora de defender para las retaguardias rivales.
