Con muchas ganas y mucha ambición. Así se muestra Jordi Mboula respecto a esta recta final del campeonato, que arrancará para la SD Huesca este viernes en La Rosaleda frente al Málaga. “Nuestro objetivo es subir directos y todos confiamos en la capacidad del equipo”, aseguró el jugador tras la sesión de entrenamiento de este lunes en el Pirámide.
“Han sido unos meses extraños en los que no sabíamos cómo se iban a desarrollar las cosas, pero al final es ya una realidad. Es un momento que esperábamos hace tiempo y tenemos muchas ganas de ver qué pasa”, añadió Mboula.
Dentro de esos interrogantes que se plantean con la vuelta a la competición, el rendimiento del equipo a domicilio es uno de los aspectos clave, empezando por este viernes en La Rosaleda. “Nosotros vamos a jugar nuestro partido, sabemos que el Málaga en su campo será un gran rival, que jugará sus cartas. Pero estamos confiados de llevarnos la victoria”. “Para conseguir nuestro objetivo de subir a Primera, hay que hacer puntos fuera de casa. Los partidos a puerta cerrada nos pueden beneficiar, y ayudarnos a lograr ese empujón que nos falta también como visitantes”.
Mboula también hizo referencia a sus sensaciones individuales en estas semanas de entrenamientos. “Llevaba mucho tiempo inactivo, y tengo muchas ganas de volver al terreno de juego y sentirme bien. Al llegar estaba un poco más lejos del ritmo de competición de mis compañeros, pero ya estoy al 100% tanto mental como físicamente para afrontar estos once partidos”.
