Teruel ha sido la primera capital de provincia donde ha arrancado la celebración de San Jorge, patrón de Aragón, que mañana tendrá lugar en Huesca y el sábado, 23 de abril, Día de Aragón, en Zaragoza.
El Presidente de Aragón, Javier Lambán, ha dedicado buena parte de su discurso a la efeméride del 40 aniversario del Estatuto de Autonomía, uno de esos momentos en la historia de los pueblos y ciudades en que según Lambán, se encuentran maneras de organizar su convivencia de forma provechosa y pacífica que a la postre resultan exitosos y son modelos a seguir. Son rememorados a lo largo del tiempo porque significan la renovación del compromiso con los principios y valores que se concitaron en aquel momento original y que cuando se celebran las efemérides sirven para saber de dónde venimos. “Solo sabiendo de dónde se viene, se sabe dónde se está y a dónde se quiere ir”. Así ha considerado hitos de especial significación la Constitución de 1978 y el período de la Transición y para Aragón, la aprobación del Estatuto de Autonomía, el autogobierno con el primer presidente al frente, Juan Antonio Bolea Foradada.
De las palabras de Bolea se puede hacer todo un programa de gobierno, ha asegurado Lambán. Historia que empezó en Teruel el 10 de julio de 1977 con la Asamblea de parlamentarios a la que se encomendó la misión de poner en marcha todo el andamiaje que acabaría en la aprobación del Estatuto y en su seno se urdió el proyecto de Estatuto de Autonomía que aprobaron las Cortes en 1982. Aragón, comunidad milenaria, perdió su esencia en el siglo XVIII y de nuevo, sus ciudadanos volvían a ser capaces de tomar las riendas de su propio destino y, además, según afirmó Bolea, los aragoneses querían autogobernarse pero siempre siendo parte orgullosa de España, a la que también se quería hacer grande.
Aquello estuvo seguido de manifestaciones multitudinarias en todas las capitales, que en Teruel concitó a 10.000 personas. «Fue un momento de consenso social, arropado por el entusiasmo enardecido de las gentes, sabiendo que lo que empezaban a crear el autogobierno tenía su origen siglos antes».
La historia posterior, según el presidente aragonés, ha sido de éxito “indiscutible”. Se puede ejemplificar en la provincia de Teruel, de cuya imagen lastimosa ha rehuído porque ha asegurado que a pocas provincias le ha sentado tan bien el autogobierno como a Teruel.
Ha repasado los potenciales en materia de agroalimentación, tan rica y variada con 3 D.O, además de la producción de trufa negra o ser sede de Dinópolis, punta del iceberg de una industria turística muy potente. También ha citado hitos “deslumbrantes” como la ruta del Tambor, los Medievales, el circuito de velocidad de Motorland en Alcañiz, del que ha adelantado que “está llamado a dar pasos muy importantes en los próximos años, tal como se desvelará el vicepresidente Aliaga, de quien depende el circuito, en los próximos meses”. Igualmente, lo hará el aeropuerto de Teruel, según Lambán, “convertido en un poderosísimo imán de atracción de empresas y que también dará noticias en los próximos años”. A estas instalaciones punteras, se suma el Observatorio Astrofísico de Javalambre, por el que se presenta la candidatura para acoger la Agencia Espacial. Igualmente, el presidente Lambán considera que nadie tiene tanto futuro a partir de la explotación de las energías renovables y el hidrógeno.
«Todas estas potencialidades son resultado del esfuerzo de todos los gobiernos y es fruto del talento y el genio de las gentes de Teruel, que el día que añadan una dosis suficiente de autoestima, a esta provincia no le podrá parar nadie los pies. Nadie la detendrá ni podrá competir con ella para atraer inversiones y actividad», ha afirmado Lambán.
Para planificar el futuro, aprovechando los aprendizajes, ha apostado por aplicar el artículo 2 de la Constitución Española, como sinónimo de igualdad de derechos y oportunidades para todos los españoles.
Ha recodado que durante el Debate del Estado de la Comunidad planteó una serie de asuntos que los aragoneses deben abordar para encaminarnos en la buena dirección que, “con consenso, podremos plantear otros 40 años de éxitos por la senda del autogobierno”.
Uno de estos asuntos prioritarios tiene que ver con la Sanidad y la atención primaria. Orgulloso de que Teruel sea la única provincia española donde se están construyendo dos hospitales públicos, también se ha mostrado satisfecho al anunciar que el problema del transporte sanitario, cuya renovación se resolverá de forma satisfactoria y la semana que viene saldrá el pliego de condiciones que duplicará la dotación presupuesta del anterior, que mantendrá todos los servicios y mejorados desde el punto de vista material y humano. Además, el Gobierno de Aragón está debatiendo con la sociedad un nuevo modelo de atención primaria, si bien, además del problema de la financiación autonómico, existe otro de carácter nacional relacionado con la falta de profesionales, cuyo problema debe resolver el Gobierno de España.
Otro acuerdo básico está relacionado con la FP, ya que ha recordado que actualmente existen, sobre todo en Teruel, más empleos que profesionales para desarrollarlos. En concreto, los empresarios turolenses cifran en 4000 los profesionales cualificados necesarios para ocupar puestos de la economía turolense.
Además, ha apostado por la Agroalimentación para que Aragón pase de granja a despensa y resolver problemas asociados como el control de las emisiones difusas, si bien también en Teruel existe una empresa puntera que permitirá solucionar los purines y los fertilizantes más útiles para los suelos.
El Presidente de Aragón ha puesto el acento en trabajar por un modelo energético propio para aprovechar nuestras renovables, tanto para el autoconsumo más barato como para atraer empresas. Ha tranquilizado sobre la preocupación en el territorio por la “invasión” de placas y aerogeneradores, asegurando que el Ejecutivo autónomo aplica criterios escrupulosos a la hora de tramitar las autorizaciones a partir de las solicitudes recibidas, administrando la legislación estatal con un cuidado “exquisito”, por lo que asegurado que, cuando terminen los procesos, se comprobará que “no hay tropelías e invasiones”.
