En la madrugada del sábado, 6 de enero, los especialistas de Tráfico de la Guardia Civil llevaron a cabo un control de alcohol y drogas en la vía Z-40. Durante la operación, el conductor de un vehículo desatendió las órdenes de detenerse emitidas por los agentes en el punto kilométrico 31. Para evitar ser atropellados, los agentes se vieron obligados a apartarse de la vía. Los oficiales iniciaron un seguimiento al automóvil, pero la excesiva velocidad con la que se retiró impidió su captura.
A pesar de no lograr detener al conductor en ese momento, se identificó la matrícula del vehículo, la cual coincidía con un incidente similar en un control anterior la noche del viernes. En la siguiente semana, la Unidad de Investigación de Seguridad Vial del Subsector de Tráfico de Zaragoza intentó localizar al titular en diversos domicilios, sin éxito. Ante esta situación, se solicitó la asistencia del Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (GIAT) del Sector de Tráfico de Aragón.
Después de una exhaustiva investigación, el pasado jueves 25 de enero, el GIAT logró ubicar al titular del vehículo. Este coincidía físicamente con el individuo que evadió el control, llevando a las autoridades a iniciar una investigación por presuntos delitos de conducción temeraria y desobediencia grave a agente de la autoridad, según lo estipulado en el Código Penal.
Es importante destacar que los especialistas de Tráfico de la Guardia Civil se dedican de manera constante a la vigilancia y control del tráfico para reducir la siniestralidad vial, redoblando esfuerzos para asegurar que conductas como estas no queden impunes.
