Iván Martínez está llevando a cabo una reeducación táctica aprovechando estos días en los que el equipo no juega partidos.
Están siendo siete días de intensa inmersión en los nuevos conceptos del entrenador de la ciudad deportiva.
Juego en rombo -con matices en defensa y ataque dependiendo del rival- y presión constante especialmente tras pérdida. Adelanto de líneas y juego por fuera.
Iván quiere mejorar la respuesta a las propuestas ofensivas de la Ponferradina. Defender más lejos de la propia puerta, no conceder lanzamientos laterales y defender desde la posesión del balón.
Jugar con cuatro centrocampistas, abrir la pelota en transiciones ofensivas y no perder la pelota en zonas sensibles.
Este es el libro de estilo del nuevo cuerpo técnico del Real Zaragoza. La letra se sabe pero… ¿Seremos capaces de interpretar la partitura?