Guarda el Estadio de La Romareda valores fundamentales para comprender la trayectoria por la que atraviesa el Real Zaragoza. Porque el escenario blanquillo es territorio donde se asientan buena parte de los méritos que esta temporada acumula la formación de Víctor Fernández.
No hay estadio que alcance las cotas de asistencia que brinda cada jornada el estadio municipal. Los más de 28.500 abonados del Real Zaragoza garantizan una asistencia por encima de los 22.000 en cada duelo, a pesar de que en numerosas ocasiones ni la meteorología ni los horarios favorecen la asistencia al campo. Pero la afición es capaz de esquivarlos para arropar con fidelidad al equipo.
Por eso, a pesar de todo, de fin de semana en fin de semana, La Romareda tirita con el empuje constante de una afición entregada. Y los frutos se dejan notar más aún en el último tramo de la competición: en lo que va de año 2020, el Real Zaragoza se ha impuesto en La Romareda al Sporting (2-0), Numancia (1-0) y Deportivo de La Coruña (3-1) y ha cedido un empate (0-0) ante el Fuenlabrada, en un encuentro en el que el cuadro aragonés acumuló indudables méritos para sumar los tres puntos.
Y eso que sus exhibiciones se estiraban a encuentros con menos rédito que méritos, como en encuentros como el Albacete (con un sorprendente 0-1 final), el Girona (3-3) o el Málaga (2-2). El sello, sin embargo, quedó marcado tanto entre la afición como en los equipos rivales.
Insiste Víctor Fernández en cada comparecencia previa a las citas en casa en el aporte fundamental de la afición. Es indiscutible que nada se asemeja al respaldo emocional que garantiza la afición blanquilla, incombustible en una exhibición que ha sido capaz de trasladar también a los desplazamientos.
Incorpora además el terreno de juego zaragocista un plus fundamental: el respeto que le confiere la misma historia del Real Zaragoza. Guarda La Romareda en su memoria mil historias de hitos deportivos que se acumulan en el corazón de los seguidores blanquillos y que contribuyen a llenar de orgullo justificado a sus seguidores. A ello también apela Víctor Fernández, en un mensaje en el que se han comprometido también los futbolistas blanquillos.
Los méritos acumulados por la camiseta y el escudo forman también parte de los valores que blanquillos y de los que el zaragocismo sabe echar mano para imponer el respeto que merece.
