La Navidad llega de nuevo al Mercado Central de Zaragoza con la recuperación del Belén tradicional, una iniciativa que el año pasado volvió a instalarse tras tres décadas de ausencia. Desde este viernes y hasta el próximo 5 de enero, el sótano del emblemático mercado municipal acogerá una representación única, compuesta por más de un centenar de figuras y estructuras íntegramente aragonesas, gracias a la colaboración de la Asociación de Belenistas de Aragón.
La edición de este año presenta una configuración diferente a la de 2023, poniendo aún más énfasis en el carácter autóctono del conjunto. Así, las escenas retratan labores cotidianas del pasado con personajes ataviados con la indumentaria típica de Aragón, además de incluir representaciones fieles de algunos de los monumentos y rincones más emblemáticos de la Comunidad. Entre ellos destacan la Puerta Baja y la Fuente de los 20 caños de Daroca, la Portada de las Monjas de Mirambel o el Castillo de Peracense. Estas referencias arquitectónicas y culturales hacen del Belén del Mercado Central una auténtica estampa navideña de raíz aragonesa.
El consejero de Economía, Transformación Digital y Transparencia del Ayuntamiento de Zaragoza, Carlos Gimeno, ha visitado esta misma mañana la instalación, pocas horas antes de su apertura oficial al público. El Belén podrá verse de forma gratuita en horario de 11:00 a 14:00 horas del 6 al 22 de diciembre (incluyendo el lunes 9 de diciembre), mientras que del 23 de diciembre al 5 de enero, la exposición se amplía con apertura tanto matutina (11:00 a 14:00) como vespertina (17:30 a 20:00). Permanecerá cerrado el 25 de diciembre, el 1 de enero y todos los domingos.
Además del Belén, el Mercado Central ha preparado otras actividades navideñas para dinamizar las compras. El día 21 de diciembre se celebrará el sorteo de lotes de productos, para el cual se están repartiendo boletos por cada 20 euros de compra. Asimismo, habrá visitas muy especiales: Papa Noel estará con los más pequeños el 21 y el 24 de diciembre, de 11:00 a 13:00 horas, mientras que un Rey Mago y un Paje recibirán las cartas de los niños los días 3 y 4 de enero en el mismo horario. La programación se completa con diversos talleres gastronómicos, reforzando así el carácter festivo, familiar y tradicional que, una vez más, convierte al Mercado Central en un punto de referencia durante las fiestas navideñas.