Durante cinco temporadas en el club blanquillo, la pieza fundamental dentro del once de cualquier entrenador, ha sido focalizada en la figura de Iñigo Eguarás. Sin embargo, después de su salida tormentosa en el pasado mes de enero, el puesto de creador de juego ha quedado bacante.
De la misma manera, la junta de Miguel Torrecilla se desvanó los sesos buscando una figura que ocupase esa posición. El elegido fue Eugeni Valderrama, un ex jugador de la SD Huesca. Su pasado en el club blaugrana no fue muy grato en sus dos temporadas.
Sin embargo, desde los primeros compases en los que el balón rodó por sus botas, el atacante catalán ha demostrado la calidad de la que está compuesto. Su capacidad de visión y su liderazgo reclamando el balón o haciéndose responsable de los balones parados, le han convertido en uno de los mejores refuerzos invernales.