El Real Zaragoza se enfrenta este sábado en Ipurúa a la SD Eibar en lo que será el primero de los cinco encuentros restantes que le quedan al conjunto blanquillo para finalizar la temporada sin haber conseguido el objetivo marcado por la dirección deportiva a principio de temporada: la famosa ‘pomada’.
No obstante, es justo destacar que, ante rivales como los de este fin de semana, el Real Zaragoza ha sabido competir e incluso podríamos decir que se ha acabado llevando más botín frente a ellos que contra los equipos de la zona baja de la clasificación, a priori sus rivales directos en algunos momentos de temporada cuando acechaba el peligro del descenso.
Si calculamos la cantidad de puntos que el Real Zaragoza ha sumado hasta el momento frente a los ocho primeros clasificados, el resultado es de 21 de las 42 unidades posibles. De esas 21 unidades, las victorias han sido frente a la SD Eibar, UD Almería, Girona y UD Las Palmas (x2), empates ante Real Valladolid, Tenerife, también Girona, y Real Oviedo junto a los dos encuentros disputados ante la SD Ponferradina. Por otro lado, solo ha caído derrotado frente a Almería, Real Valladolid y Tenerife en la ida.
A su vez, si contamos como referencia los últimos diez clasificados, es decir, todos los que se encuentran por debajo del Real Zaragoza, las cuentas son las siguientes: 22 de 51 puntos ha conseguido el equipo de Juan Ignacio Martínez, prácticamente los mismos números que contra los rivales de la parte alta a pesar de entrañar, a priori, una mayor dificultad. Una muestra de lo complicados que se le hacen al Real Zaragoza los encuentros en los que los equipos muestran un estilo menos vistoso y alegre, normalmente con bloque bajo, cómodos sin balón, obligando al equipo a practicar un juego más posicional donde no encuentran la tecla, frente a los partidos más “abiertos”, donde el rival también busca el balón y en los que el conjunto blanquillo encuentra más espacios para finalmente, conseguir grandes resultados como los vistos esta temporada.
Y es que es extraño que en una temporada en la que a los grandes de la categoría se les ha conseguido doblegar en varias ocasiones, no se haya sacado apenas botín ante los rivales que ahora mismo, por méritos propios, ocupan la parte baja de la clasificación.