El Real Zaragoza encara su próximo compromiso liguero frente al Cádiz con mejores perspectivas en materia de efectivos. Miguel Ángel Ramírez recupera a dos piezas clave: Samed Bazdar y Francho Serrano. El primero, que regresó de una lesión y vio la quinta amarilla de la temporada ante el Tenerife, ya cumplió su sanción en la pasada jornada contra el Málaga. El segundo, canterano y pieza clave, se incorpora a la convocatoria tras superar una rotura fibrilar a nivel de la musculatura isquiotibial de la pierna derecha, que lo ha mantenido seis semanas alejado de la competición desde el duelo ante el Racing de Ferrol.
La principal novedad en el entrenamiento fue la presencia parcial de Mario Soberón, delantero cuya progresión se vio frenada el pasado 14 de diciembre en Eibar, durante su reaparición tras dos meses de baja. Soberón completó parte del trabajo grupal y, según la evolución de su proceso de recuperación, podría reaparecer contra el Albacete el próximo 7 de febrero. Este regreso se estima clave para reforzar la parcela ofensiva del conjunto aragonés en el tramo decisivo de la temporada.
A pesar de estas buenas noticias, la enfermería zaragocista no está exenta de contratiempos. Carlos Nieto ha sufrido una fractura en la falange proximal del quinto dedo de su pie derecho tras un pisotón accidental durante un entrenamiento. El tiempo de baja exacto dependerá de la evolución de la lesión y de cómo responda a los tratamientos que se le han prescrito. En cualquier caso, el cuerpo técnico y los servicios médicos del club permanecen atentos para no acelerar plazos y evitar recaídas, en un momento en el que las ausencias y retornos están marcando el devenir del Real Zaragoza.