Si algo caracteriza a Aragón es su diversidad, pero no solo paisajística, sino cultural, natural, en fiestas y experiencias que hacen que cada viaje a Aragón sea único. Para que puedas vivirlo con intensidad te dejamos 5 planes que no puedes perderte en este mes.
- Ensuciar tus botas de montaña.
Estar parado en Aragón es difícil: montañas, esquí, pesca, surf, btt… este verano te recomendamos lo más sencillo del mundo: andar. Los miles de kilómetros señalizados de senderos te harán el viaje más sencillo. Puedes elegir entre senderos turísticos: pequeñas rutas para descubrir tesoros naturales y culturales que son aptos para toda la familia; o grandes rutas de varios días de duración: Camino de Santiago, GR que discurren por todo el Aragón, Vías verdes, trekkings a más de 2.000 metros… Todos nuestros caminos están a tus pies, y para ayudarte a recorrerlos Aragón cuenta con una estupenda red de guías y ayudas al caminante, como traslado de equipaje, para hacerlo más sencillo.
2. Acordarte de Stendhal disfrutando del turismo rural.
Aragón cuenta con 13 pueblos considerados como Pueblos más bonitos de España, pero te aseguramos que hay más. Aínsa, Alquezar, Albarracín, Mirambel, Alcañiz, Daroca, Tarazona, Sos del Rey Católico, Uncastillo…. Disfrutar de estos pueblos con un gran pasado que puedes intuir visitando sus calles y plazas siempre es una delicia. Su arquitectura única y singular, sus ubicaciones estratégicas y su entorno los convierten en destinos ideales desde los que comenzar muchas otras aventuras.
3. Recorrer Zaragoza nocturna visitando sus iglesias.
Una experiencia muy especial que se llama FIAT LUX. Se trata de dos rutas nocturnas exclusivas por las iglesias más emblemáticas del centro histórico de Zaragoza. El programa de visitas guiadas llenará de luz la oscuridad y el silencio de los templos y te acercará a un universo de dimensiones únicas.
Puedes escoger entre visitar las dos catedrales de Zaragoza evitando las aglomeraciones de feligreses y visitantes que hay durante el día o visitar las tres iglesias con más devoción de la ciudad.
4. Revivir el Compromiso de Caspe.
En 1412 se reunieron en Caspe representantes de todos los territorios de la Corona de Aragón para elegir a un nuevo rey al morir sin descendencia Martín I el Humano. Este importante encuentro se rememora año tras año en Caspe. Durante tres días, el pueblo entero se engalana y sus vecinos salen a la calle portando atuendos de época, mientras que sus calles se llenan de mercados, exhibiciones de tiro, cetrería, música… El acto central tiene lugar en las escalinatas de la colegiata Santa María la Mayor, lugar donde se publicó el nombre del nuevo rey: Fernando de Antequera.
5. Montarte a lomos de las dos ruedas.
Si unes junio, Aragón y bici, piensas en la prueba de todas las pruebas: La Quebrantahuesos y su hermana pequeña, la Treparriscos. Esta dura prueba cicloturista, es un hito en la agenda de muchos amantes de la bicicleta. Con salida y llegada en Sabiñánigo, transcurre por el Pirineo aragonés y francés, en un recorrido con 3500 metros de desnivel acumulado.
Pero si aún no estás preparado para esta prueba o si lo tuyo es el gravel o la btt, Aragón cuenta con más de 4.000 km señalizados en rutas para bicicletas en todo tipo de estilos. Desde la aridez esteparea de la Sierra de Armantes, al silencio de la ruta Montañas Vacías o los caminos recuperados del Sobrarbe de Zona Zero BTT, Aragón tiene una ruta para ti.