El Real Zaragoza volvió a dejar su portería a cero tres jornadas ligueras después. Los de Juan Ignacio Martínez empataron a cero en El Toralín y recuperaron una de las claves para el crecimiento del equipo desde la llegada del entrenador alicantino. La Sociedad Deportiva Ponferradina, que venía de seis partidos ligueros consecutivos marcando gol en su feudo, no pudo perforar la portería de un excepcional Cristian Álvarez, quedándose sin ver puerta en su casa por segunda vez en toda la temporada.
Unos números que hablan de la dificultad de salir de El Toralín sin encajar gol, algo que tan solo consiguió el Fuenlabrada, en la décima jornada, y los zaragocistas, en el día de ayer. Un Real Zaragoza que necesitaba cortar las cifras de tantos encajados en los últimos partidos en LaLiga SmartBank, donde había recibido siete en las tres últimas fechas. Así lo hizo en Ponferrada, recuperando la senda de la portería a cero, “la base desde donde hay que empezar”, como señaló Jair Amador.
Esta es la novena portería a cero de la campaña -siete en LaLiga SmartBank y dos en Copa del Rey-, y el cuadro aragonés deberá seguir esta línea, la de agrandar su fortaleza defensiva, la de dominar su área propia, para comenzar a construir sus acciones ofensivas y estar más cerca de ganar los partidos. Con toda la segunda vuelta por delante, el recobrar esta virtud se presenta fundamental para obtener resultados.
Una puerta a cero que el Real Zaragoza intentará repetir en el estadio de La Romareda, donde lo ha podido lograr en los dos de los últimos cuatro choques disputados (1-0 ante el Eibar, 2-0 frente al Burgos, 0-2 contra el Tenerife y 0-2 ante el Sevilla). Un objetivo, el de no encajar, básico para los de Juan Ignacio Martínez.